martes, 20 de abril de 2010

por primera vez en la historia Argentina una Mujer preside la suprema corte de Justicia de Buenos Aires


Por vez primera en sus 135 años de historia, la Corte Suprema de Justicia de Buenos Aires está presidida por una mujer. Hilda Kogan, magistrada de reconocido prestigio, se encuentra a partir de hoy al frente de la más alta instancia judicial bonaerense.
De trayectoria intachable, la juez Kogan estudió Derecho en Buenos Aires. Máster en Sociología por la Universidad Chapel Hill de Carolina del Norte, comenzó a ejercer como abogado penalista hace algunas décadas. Especialista en derecho laboral, con el devenir de los años dio el salto a la Judicatura y en el 2002 fue designada miembro del Tribunal que presidirá durante los próximos doce meses, tal y como establece el sistema de rotación anual de la Constitución provincial.
Profesora en la facultad de Derecho de la UBA (Universidad de Buenos Aires) Kogan ha logrado moverse con soltura en fueros dominados por hombres. Respetada dentro y fuera del Poder Judicial pertenece a la Asociación de Jueces por la Democracia y a la Asociación de Mujeres Jueces de Argentina. Observadora, de mirada aguda y discurso claro advierte: Justicia tardía es injusticia. En este sentido nos falta mucho por hacer.
Preocupada por el aumento de la violencia de género en Buenos Aires, donde viven más de quince millones de personas, equivalente a casi el 40 por ciento de la población de Argentina, lamenta: Cada vez hay más casos. No disponemos de datos sobre cuántos había antes y se ocultaban y cuántos hay ahora pero hay algo positivo: Se ha roto el techo de cristal del silencio y hoy se habla de un tema que antes estaba prohibido.
En distintas entrevistas publicadas insiste en que la prioridad va más allá del maltrato a las mujeres, “la prioridad es la violencia familiar. No hablo sólo de violencia de género, también de agresiones contra los chicos y, sobre todo, algo que está más escondido, la violencia contra la gente mayor, contra los ancianos. Hay muchísimos casos de personas que están en las casas porque cobran una jubilación pero que reciben un maltrato increíble. La sociedad –admitía en declaraciones a La Nación hace unos días- tiene problemas muy serios”

fuente: Carmen de Carlos / ABC.es

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